La primera mujer en correr una maratón fue Kathrine Switzer. Por aquel entonces, 1967, no tan lejano, correr estaba destinado exclusivamente a los hombres. Logró secretamente inscribirse con el dorsal número 261 en la maratón de Bostón de 1967 como KV Switzer. Cuando, durante el transcurso de la carrera, uno de los jueces de la carrera detectó que era una mujer se lanzó sobre ella e intentó detenerla. A pesar del incidente y su descalificación Switzer completó la carrera.